Últimas noticias
Skip to main content

SANTO DOMINGO.- El puente seco de Pontón, La Vega, que colapsó durante las lluvias generadas por el huracán Fiona, y que estaba fuera servicio hacía dos meses por avanzado deterioro, debe ser demolido completamente y construir uno con una estructura reforzada que ofrezca seguridad para los miles de vehículos que transitan por la Autopista Duarte.

“Lo ideal es hacer un puente nuevo demoler el que está, demoler las pilas, hacer un cimiento con pilotes hincados, una estructura reforzada para tener un puente seguro, por ahí va a estar pasando todo el que cruce desde Santo Domingo a Santiago, o sea que eso es un asunto delicado”, consideró el ingeniero civil Rafael Durán.

Se preguntó que tan seguro será la colocación de vigas sobre una estructura reparada, que podría volver a fallar en cualquier momento. El Ministerio de Obras Públicas y Comunicaciones (MOPC), dijo que colocará 16 vigas para reestructurar la obra.

“Ellos estaban haciendo un trabajo porque la pila había fallado, entonces al ceder la pila y ser tan corto el apoyo, durante las lluvias la pila se movió algo más y generó que las vigas se cayeran”, explicaron ingenieros consultados en La Vega, que desean omitir su nombre.

“Una pila de un puente solo se mueve si falla el suelo, entonces lo más probable es que le vayan a poner vigas metálicas que pesan menos como las que tiene el elevado de Los Alcarrizos y las de Odebrecht, pero cuando tu tienes una pila mala versus el peso que va soportar el puente, no hay mayores garantías”, precisaron los expertos.

Durán insiste en no entender las razones por las que Obras Públicas está reparando una estructura de más de 25 años de levantada y cuyo deterioro ordena su demolición total y ser construida sobre una zapata más profunda y fuerte, de tal manera que no se pongan en riesgo vidas.

Supervisión en puente seco

El entendido en la materia considera que obras públicas debe designar una comisión de sus técnicos para que hagan una evaluación en cada puente seco que son los que mayor problemas presentan, los de la Autopista Duarte; al igual que los pasos a desnivel en todo el país.

“Hay que revisarlos y muchos elevados en la capital sobre todo el de la Churchill y el de la Luperón con Avenida George Washington”.

Expone que ni su condición de ingeniero le quita la preocupación de las razones por las cuales en los puentes y elevados de República Dominicana, los apoyos de las vigas son tan pequeños.

“Esos apoyos son de 15 y 20 centímetros cuando eso puede ser de 40 ó 50 centímetros. Eso con un movimiento, un temblor pequeño se van a caer”, asegura.

Citó el caso de los Estados Unidos donde ese tipo de estructura se abolió porque estaba presentando fallas.