SANTO DOMINGO.- Aparte de las inspecciones cotidianas de los bomberos, la discoteca Jet Set nunca fue sometida a ningún proceso de supervisión por parte de los organismos estatales, tampoco a ninguna reparación, reveló este miércoles Antonio Espaillat, gerente y propietario del centro nocturno, donde el 8 de abril se desplomó el techo ocasionando 232 muertes.
“Ningún tipo de reparación se hizo en Jet Set”, respondió el empresario en una entrevista con la periodista Edith Febles, difundida por el programa “El Día”, de Telesistema.
Explicó que en los 30 años que llevaba operando el centro de entretenimiento siempre hubo problemas con los plafones, que siempre se cambiaban, de hecho el mismo día de la tragedia, pero que nunca la supervisión estuvo vinculada al tema estructural del techo.
“Siempre teníamos el techo impermeabilizado, pero sí, había filtraciones”, explicó.
En los 30 años el Jet Set recibió dos remodelaciones: En el año 2000 se remodeló y en el año 2015, mayormente tapicería, alfombras, sillas, mesas y anexos fuera de la estructura. Espaillat aseguró que siempre que hacían remodelaciones contrataban ingenieros expertos, pero que eran remodelaciones de abajo, como mobiliario y decoración, nunca de la edificación.
Sostuvo que visitó el lugar, tras la tragedia que cobró la vida de más de 230 personas y ocasionó heridas a cerca de 200 y que salió devastado. “Cuando fui mi dolor se acrecentó, vi toda una vida, no tenía palabras para expresarle todo lo que vi. Nosotros nacimos con ese negocio, creado por mi madre. Yo no faltaba. En diciembre tuvimos como 20 fiestas y yo nunca falté”.
Indicó que en los 30 años que funcionó el lugar en el sector el Portal, siempre hubo inspección de los bomberos para verificar extinguidores, salidas de emergencia, cosas rutinarias, salud pública, “pero nunca una revisión estructural”.

Antonio Espaillat. (Foto/Periódico Hoy).
Espaillat expresó que se siente impotente frente a la situación ocurrida, pero que si hubiera habido algo que pudo haber hecho, hubiera procedido porque su familia siempre estuvo ahí y que siempre sintió la responsabilidad de estar ahí durante los 30 años de manera ininterrumpida.
“Desde que lo fundamos en ese local hace 30 años, teníamos el techo en plafón y yeso, y siempre se nos caían los plafones y el yeso. Por eso el polvo blanco”, afirmó el empresario.
Abundó que la caída era provocada principalmente por filtraciones de agua provenientes de los aires acondicionados. “No nos dábamos cuenta porque los plafones de yeso no se abomban, sino que absorben el agua y caen”, agregó.
Incendio
Explicó que el incendio ocurrido en el año 2023, se trató de un rayo que ocasionó un fuego en el área de la planta y que solo sufrió esa área y los cables y que de hecho a la semana, ya el lugar estaba abierto.
En su opinión los hechos ocurrieron por algo “para que todos revisemos y que todos estemos atentos a muchas cosas que ninguno estábamos, esto además del dolor, representa un despertar para muchos aspectos de que estemos más pendiente de muchas cosas, que ninguno estábamos pendientes, va a servir positivamente para muchas cosas”, manifestó.
Negó que alguna vez haya recibido recomendación de un ingeniero para remodelaciones, tras precisar que se enteró de eso en este proceso y que se trata de una versión como muchas otras. “Eso no es verdad a mi nunca se me ha acercado nadie, aparte de que con 4 millones de pesos no se puede arreglar ni la esquina de un techo”.
Sobre los seguros, explicó que cubría “todo lo que nuestros aseguradores recomendaban como incendios, seguridad de personas, terremotos. “Obviamente que no pensamos en que se caería el techo”.
Fuente: Programa El Día, Telesistema.
Foto: Periódico Hoy.