Sugiere a los agentes mitigar, limitar y evitar que las operaciones de cualquier tipo sirvan para el blanqueo de capitales. “Los agentes inmobiliarios tienen la responsabilidad de clarificar la información y saber quién es la persona con la que está haciendo negocios”.
SANTO DOMINGO.- Si usted como agente inmobiliario es requerido por el Ministerio Público como parte de una investigación por una operación inmobiliaria que generó sospecha, su más férrea defensa será contar con los documentos que avalan que siguió todos los procedimientos de la debida diligencia.
El experimentado abogado Robinson Cuello, aconseja a los asesores inmobiliarios archivar por un período de diez años el sustento de los pagos que le han efectuado en su ejercicio como corredor de bienes raíces, así como el expediente completo de sus clientes, donde quede debidamente clarificado el tipo de operación que se llevó a cabo y sus respectivos soportes.
“Su defensa como agente inmobiliario si lo llaman es verificando sus documentos, levantando su debida diligencia. Como sujetos obligados tienen que resguardar la información por un periodo de diez años, archivar el sustento de los pagos que le han efectuado”, expuso el catedrático, al exponer anoche sobre el tema lavado de activo, en la certificación CBR 01.
Se trata del curso formativo que lleva a cabo durante esta semana la AEI, Asociación de Agentes y Empresas Inmobiliarias, dirigida a nuevos agentes inmobiliarios. Esta vez participan alrededor de 170 alumnos, a quienes un grupo de expertos introducen al mundo inmobiliario, compartiéndoles su sabiduría y experiencia acumulada en el sector.
Cuello comentó que las operaciones inmobiliarias no solo consisten en ganarse una comisión, sino demostrar que el dinero que se obtiene en el ejercicio es de procedencia legal. “Hoy día debe quedar clarificado el tipo de negocio que se hace con los clientes. Si a usted le depositan en el banco más de lo que contempla la Ley Contra el Lavado de Activos y el Financiamiento del Terrorismo ( 155-17) el banco le va a llamar y para liberarle los fondos hay que buscarle la prueba que establezca su vinculación entre el negocio y el pago de su comisión.
Explicó el destacado profesional que la debida diligencia consiste en conocer el cliente, saber con quién hace negocios, su nombre, actividad económica a que se dedica, origen de los fondos, declarar que la procedencia de sus bienes es lícita, pedirle referencia del sistema financiero, porque es lo que permite corroborar la veracidad sobre las informaciones suministradas.
Sugiere a los agentes mitigar, limitar y evitar que las operaciones de cualquier tipo sirvan para el blanqueo de capitales. “Los agentes inmobiliarios tienen la responsabilidad de clarificar la información y saber quién es la persona con la que está haciendo negocios”.
Con la puesta en marcha de la Ley 155-17 la cifra para las transacciones es de apenas un millón de pesos, cuando se refiere a operaciones inmobiliarias y “si excede ese monto se trata de una operación dudosa”, por lo que vendiendo una propiedad los agentes pueden verse involucrados en problemas.
“Si usted le vendió a una persona, hay indicios que usted logra ver durante el negocio, por ejemplo cuando no tiene fuente de ingreso claro, pruebe la procedencia y origen de esos fondos. Una persona que no puede tener cuenta ni en RD ni en el extranjero”. Les recordó a la audiencia que el Ministerio Público a la hora de hacer sus investigaciones no discrimina, por lo que insistió en que se debe ser un fiscalizador de los valores recibidos.
Otro aspecto que destacó es el de las transacciones en las que se giran cheques a nombre de terceras personas, lo que genera alerta al sistema financiero. “Cuentas y pagos de terceros que no guardan relación con el adquiriente. Lo recomendable cuando ven una sospecha es que el agente no realice el negocio”.
Para el experto es recomendable que a los clientes habituales se les actualice la debida diligencia cada dos años para asegurar que todo está en orden, y que también en los alquileres deben tomarse iguales previsiones.
Asimismo Cuello trató el tema de la depuración de los inmuebles, destacando que una propiedad sin objeciones, asegura el cierre de negocios de manera efectiva.
El tema de los fideicomisos fue tratado por el experto Roberto Carlo Jorge.