Muchas instituciones del Estado ya cuentan con sistemas digitales para cargar documentos y realizar seguimientos, pero a menudo estos sistemas no muestran las actualizaciones más recientes de los expedientes.
Escarlin Pozo
El Inmobiliario
PUNTA CANA.-El sector de la construcción en la zona Este de República Dominicana enfrenta un creciente desafío: el constante retraso en la emisión de permisos para proyectos inmobiliarios.
Esta situación ha generado preocupación entre las constructoras, quienes aseguran que el avance de sus obras se ha visto afectado por la lentitud de las autoridades.
El director de la desarrolladora Morada, Daniel Cordero, afirmó que esta situación dificulta el progreso de la zona y podría deteriorar el prestigio debido a las constantes demoras en las entregas de los proyectos.
“Si no tenemos un reparto de las autoridades con el tema de los permisos, es imposible que nosotros podamos desarrollar esta zona. Esta zona ha perdido prestigio, por ejemplo, por muchas entregas tardías que tienen muchos desarrolladores”, indicó.
Cordero aseguró que este escenario se debe, en gran medida, a las demoras en la emisión de permisos por parte de diversas instituciones del Estado.
Al ser entrevistado por El Inmobiliario, señaló quevarios ministerios que han tomado un rol central en esta situación, han afectado el progreso de los proyectos inmobiliarios.
Para explicar las causas de este estancamiento, explica que una de las razones que agrava los retrasos es la falta de sincronización en las plataformas digitales y los cambios frecuentes en el personal encargado de los procesos.
Según detalló, estos cambios generan confusión y descoordinación entre las instituciones.
A modo de ejemplificación, escenificó que cuando una entidad cambia su sistema de gestión o digitaliza su plataforma, otras instituciones no lo hacen al mismo ritmo, lo que dificulta el manejo de los expedientes.
Daniel y Arnold Cordero. (Fuente externa).
Retraso en entrega de sus proyectos
Daniel declaró que el promedio de retraso en sus proyectos es de aproximadamente un año, debido a los problemas con la permisología.
Sin embargo, aclaró que este aplazamiento no afecta a todas las obras, ya que algunas han sido vendidas más recientemente y aún están dentro de los plazos previstos para su entrega.
El impacto principal se refleja en el 25 % de los proyectos más antiguos, donde las demoras se deben a los retrasos en la obtención de permisos.
Por otro lado, precisó que, en condiciones normales, una licencia puede tardar entre dos y tres meses en ser emitida, siempre y cuando no haya contratiempos.
Dentro de las explicaciones que brindan los funcionarios, agregó que justifican los retrasos señalando la sobrecarga de trabajo. No obstante, enfatiza que el verdadero problema es la falta de personal para manejar el volumen de solicitudes que llegan.
Otros obstáculos y soluciones propuestas
El subdirector de la desarrolladora Morada, Arnold Cordero, explicó otra consecuencia crítica de los retrasos en la permisología: la imposibilidad de entregar formalmente las propiedades a los clientes, aun cuando las viviendas estén completamente terminadas.
Señaló que, sin los permisos requeridos, no se puede transferir legalmente la propiedad al comprador. Esto no solo afecta al cliente, sino también a la constructora, ya que el comprador no puede saldar su deuda con la empresa.
Arnold agregó que muchos clientes dependen de préstamos bancarios para completar sus pagos, pero los bancos no otorgan financiamiento si la propiedad no cuenta con los permisos necesarios. Esto genera un ciclo de retrasos, afectando tanto a los desarrolladores como a los compradores.
El subdirector también destacó la necesidad de automatizar los procesos dentro de las instituciones gubernamentales. Señaló que muchos de los procedimientos actuales son anticuados y requieren imprimir documentos y revisarlos manualmente, cuando ya existen herramientas digitales que permitirían agilizar el trabajo.
Cordero subrayó que muchas instituciones del Estado ya cuentan con sistemas digitales para cargar documentos y realizar seguimientos, pero a menudo estos sistemas no muestran las actualizaciones más recientes de los expedientes.
En algunos casos, los empleados revisan documentos antiguos, ignorando nuevas versiones que fueron presentadas meses después, lo que genera confusión y retrasa aún más la aprobación de los permisos.

