“Ser mujer ha sido sin duda una gran ventaja en todos los aspectos de mi vida, como esposa, madre e hija. En un mundo de tantos caballeros, esto nunca ha sido una limitante, por el contrario, me ha hecho ver la importancia de especializarse y trabajar con integridad y eficacia, logrando ser una persona respetada por todos.
SANTO DOMINGO.- Ella se desenvuelve en un mundo predominantemente masculino. Pero eso no la asusta, por el contrario, saca ventaja al respeto que le profesan y por esa y muchas razones ha comprendido la importancia de especializarse en su área, tarea que ha asumido al pie de la letra.
Escogió un área de los bienes raíces que no a todos encanta, pero también para ella eso es ventaja, trabaja a sus anchas con propiedades numerosas que le ofrecen mayores oportunidades de negocios. Sus competidores suelen ser de otras latitudes, igual asume el reto y se prepara constantemente para estar a la altura de sus colegas y salir siempre por la puerta grande.
Y es que cuando se habla de bienes raíces comerciales, corporativos e industriales, el nombre de Indhira Desangles retumba con el eco de la experiencia, la eficiencia y el compromiso. De 21 años como corredora, siete los ha dedicado a esa especialización, sector del que habla con absoluta propiedad y dominio.
Este 2022 apenas inició, habló para El Inmobiliario del traslado de su marca, ahora Desangles Properties, donde cuenta con su propio equipo de vendedores porque su inventario de propiedades y demandas sobrepasaba su agenda laboral y entendiendo que el crecimiento se asume y se ejecuta, más aún en una mujer de vuelto alto y cuyo límite es el cielo.
Para esta capitaleña “ser mujer ha sido sin duda una gran ventaja en todos los aspectos de mi vida, como esposa, madre e hija. En un mundo de tantos caballeros, esto nunca ha sido una limitante, por el contrario, me ha hecho ver la importancia de especializarse y trabajar con integridad y eficacia, logrando ser una persona respetada por todos”.
Se define como una mujer que ha logrado todo lo que se ha propuesto, “por la gracia de Dios y el constante esfuerzo, honestidad y actitud positiva ante las adversidades”. Roberto de 10 años y Valentina (7), junto a Shakira su hija (perruna), representan los tesoros de su vida.
La chica corporativa es una mujer de fe. “Como hija de Dios, mi principal deber es servir, por ello mi rol lo divido entre servir a mi familia, amigos y clientes, siempre dando lo mejor de mi. Priorizo mi tiempo con Dios y el se encarga de eficientizar mi tiempo y multiplicarme por diez”, responde cuando le preguntamos sobre el manejo de su tiempo.
Para Indhira Desangles, la mujer inmobiliaria cada día se está haciendo sentir con más fuerza, en un mundo laboral exigente, donde hay que dedicar tiempo muchas veces, noches, fines de semana y feriados, entre citas, captaciones, firmas, llamadas, ventas, alquileres; por ello entiende importante que el factor motivante para incursionar no sea sólo el dinero. “Éste será la consecuencia de una buena gestión de venta y post venta”.
Piensa que el terreno ganado por las mujeres en distintas posiciones no es coincidencia, sino fruto de su capacidad, preparación continua, empeño, esfuerzo, deseos de superación “y sobre todo que somos multitarea, con una gran empatía hacia los demás. Por eso vemos cada día más mujeres en altos cargos empresariales a nivel local y global, y muchas más con emprendimientos de bienes raíces y negocios relacionados a ese sector”.
La optimista y persistente Indhira le complace ver el cambio cultural que experimenta la sociedad a favor de las mujeres. “Cada día veo más agentes femeninas nuevas en la industria, lo veo en las redes, en los grupos de chat, en los cursos y webminars. En mi sector hay definitivamente más mujeres que hombres ejerciendo bienes raíces, y tenemos varios grupos muy unidos y que continuamente nos ayudamos unas a otras”.
Pero hay una cosa que le genera impotencia. “Cuando opinan que esta profesión es algo «fácil», que ganamos mucho y nos esforzamos poco. En efecto, en cualquier rubro, quien no se esfuerza no obtiene resultados, sin embargo, en este, se requiere de una constante preparación y de muchos sacrificios personales que una hace como mujer, para poder gestionar con el mismo éxito, la casa, los hijos, los amigos, la familia, entre otros”.
En el nicho que escogió la mayoría de sus clientes y colegas son hombres y donde la competencia vuela por los aires y donde el conocimiento, la profesionalidad, y honestidad son altamente valoradas, cosa que a esta fajadora le sobra.
Está convencida de que la mujer en el sector inmobiliario es valorada en su justa dimensión, por eso les envía un mensaje a todas: “entrega tu vida, tu día, tu noche, tu familia, tu trabajo, tus planes, tus metas, tus sueños, tus anhelos a Dios, y él se encarga de cumplir el propósito que tiene contigo como mujer integralmente. Se una mujer virtuosa, como lo dice Proverbios 31, 10-31”.
