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“Me enamoré de Jazmín por su alegría, y los valores que viven en ella, eso despejó toda duda de que era la mujer perfecta para mi”, cuenta Tirso.

SANTO DOMINGO– Es uno de los amores que la pandemia parió. Rompieron récord conversando extensas horas durante la etapa del confinamiento. Eran compañeros de trabajo, pero ninguno se había percatado de su mutua atracción; pero llegó la COVID-19 y los conectó tanto que ya su amor está en proceso de reproducción.

¿Alguno ha durado nueve horas conversando por teléfono?. Tal vez a Tirso Herrera y Jasmin Lovera haya que darle el record Guinness. Se acercaron un poco más durante la época de encierro obligatorio que el país y el mundo vivió, para compartir las preocupaciones e incertidumbres que trajo consigo el coronavirus. Se conectaban nueve horas consecutivas, cuyo tiempo rendía para variar de tema y charlar de la vida y sus coincidencias.

Obviamente hubo tantas coincidencias que se encendió la chispa del amor y variaron los planes de los dos compañeros de la empresa Premiun Real Estate. Y como todo estaba hablado con esas kilométricas conversaciones, el noviazgo duró apenas un año, más uno que llevan casados y en la dulce espera porque Mateo José ya viene en camino para complementar la feliz carrera del trio del amor.

“A mi me llamaba mucho la atención de Tirso su determinación en cada cosa que hace, siempre le decía en nuestras conversaciones tan largas, que creía en él y en ese momento aún no sabía por qué, pero así ha sido, esa honestidad y transparencia que ha prevalecido en nuestra relación es mi mayor bendición”, dice Jasmin.

“Me enamoré de Jazmín por su alegría, y los valores que viven en ella, eso despejó toda duda de que era la mujer perfecta para mi”, cuenta Tirso.

Este amor de los tiempos de pandemia sigue siendo expresivo y no pasa un día en que Tirso le manifieste a Jasmín sus sentimientos, “complementado con exquisitos detalles que a mi me encantan”, comenta la feliz embarazada. 

Ella se define muy detallista. “Considero que es uno de mis lenguajes de amor, procuro cada día, no importa si es o no una fecha importante, demostrarle lo afortunada que me siento de la hermosa familia que tenemos”. 

Crecer juntos cada día, fortaleciendo la comunicación es la fórmula que aplican para mantener a flote su relación de pareja. Su horario de encuentro para ponerse al día con los temas familiares es por las noches cuando concluyen sus compromisos de trabajo.

Aunque en un año han cultivado buenos recuerdos, nada ha marcado su amor, como las largas conversaciones de pandemia. “Rompimos récord hablando por teléfono coincidimos en que ninguno había durado hablando 9 horas seguidos con alguien”. 

Este amor tendrá mucho que contar a Mateo José, no solo de las kilométricas charlas de papá y mamá, también del momento histórico que vivió el mundo y vivirá enlazado junto al antes y después del coronavirus.

 La “gordita” como le llama cariñosamente él y Tirso para nada agradecen la llegada de la pandemia, pero sí el momento en que Dios permitió su encuentro y dicen que volverían a darse el sí por los siglos de los siglos.