SANTO DOMINGO. – Brenda aún no toma la decisión de si compra una casa en Punta Cana o un apartamento en la capital. Alguien le recomendó que leyera El Inmobiliario porque ese periódico publica artículos interesantes sobre el proceso de compra de propiedades.
Así lo hizo y encontró varios artículos de expertos que llamaron su atención sobre los detalles a tener en cuenta para tomar la decisión de comprar, más allá del precio, al ubicación y la legalidad del proceso: el contexto situacional, el emplazamiento donde se encuentra la propiedad.
“Uno no compra solo paredes, compra entorno”, leyó Brenda en un artículo de Luz del Alba Rodríguez, abogada experta en derecho inmobiliario, publicado el 18 de septiembre de 2025. Y pensó “Es verdad, porque uno no puede ir a entregar sus cuartos, ganaos guayando la yuca, para después vivir en un infierno” y tomó nota de la recomendación de verificar la zonificación y el uso de suelo, para evitar restricciones legales que limiten el uso previsto del inmueble.
El corazón de Brenda nunca se mudó a New Jersey, ahora que quiere regresar a sus raíces, es cauta pues ha escuchado muchas historias de decisiones tomadas a la ligera y fracaso económico por una mala compra.
Ella tiene claro que la legalidad está muy bien, pero también que quiere tranquilidad y encontró un artículo del día 25 de septiembre en el que se cita a RealAdvisor, una plataforma internacional especializada en bienes raíces, recomendando tener en cuenta la ubicación del inmueble.
Recomiendan tanto a agentes como a compradores, evaluar la cercanía a lugares de trabajo, escuelas, hospitales, supermercados, vías principales, conectividad vial y aunque ellos no lo mencionan, en República Dominicana es muy importante tener en cuenta la cercanía de un colmado o colmadón.
Para cuidar la salud mental, RealAdvisor insiste en observar los niveles de seguridad, el comportamiento del vecindario en distintos horarios, para identificar posibles ruidos, congestión o la calidad de los servicios esenciales, por que “La ubicación afecta directamente la calidad de vida”.
Brenda siguió navegando en inmobiliario.do y encontró una frase del equipo editorial del periódico, en un artículo del 30 de septiembre: “La inspección del entorno es tan importante como la del inmueble”, que la dejó pensando en que los aspectos cotidianos de la propiedad no aparecen en los folletos, pero pueden marcar la diferencia: ¿hay colmadones ruidosos cerca?, ¿se forman charcos cuando llueve?, ¿se va mucho la luz?
Los expertos que han publicado en El Inmobiliario sugieren visitar la zona en distintos horarios y hasta hablar con los vecinos.
Los asuntos de seguridad jurídica
Brenda siguió leyendo y encontró una publicación fechada el 19 de agosto de 2024 y firmada por la periodista Danielis Fermín, en la que las expertas Yanerys de León y Yodelka Parra ofrecieron recomendaciones clave para quienes buscan adquirir vivienda en República Dominicana.
Yanerys de León, consultora inmobiliaria, aconsejaba en ese momento iniciar el proceso con asesoría profesional respaldada por firmas legales, para garantizar orientación técnica, financiera y jurídica desde el primer momento. Eso ella ya lo tiene claro.
Mientras, Yudelka Parra recomendaba tener claro el objetivo de la compra: si es para vacacionar o para invertir: en el primer caso, el comprador debe priorizar la comodidad y la ubicación; en el segundo, la rentabilidad, el precio por metro cuadrado y la demanda de alquileres.
De todos modos, ambas coincidieron en que el comprador debe tener claridad sobre su presupuesto, capacidad de endeudamiento y los costos adicionales al precio del inmueble, como impuestos, comisiones y gastos legales, además de considerar indicadores económicos como la inflación, las tasas de interés y el precio de los materiales de construcción, para tomar decisiones informadas.
Nuestra dominican-york siguió buscando. Encontró otro artículo, publicado el 10 de noviembre de 2024, en el que la abogada Massiel Martínez Marte advertía sobre los riesgos legales que enfrentan los compradores cuando no registran correctamente la compraventa de un inmueble.
“Sin ese paso, el comprador no tiene garantía legal de que el inmueble está libre y puede ser suyo sin conflictos”, señaló y Brenda abrió los ojos muy grandes sobre todo cuando leyó que “omitir el registro puede incluso permitir la doble venta de una propiedad, dejando al comprador sin protección jurídica.”
Con estas lecturas en El Inmobiliario, Brenda aprendió que debe verificar si la propiedad tiene cargas o gravámenes, como hipotecas o litigios pendientes, y asegurarse de que el registro de compraventa esté debidamente formalizado para obtener el Certificado de Título.
Que debe venir al país y rogar al cielo que llueva para verificar si se hacen charcos o el parqueo se inunda; si en el colmadón ponen musicón o si se entapona la calle a la entrada y salida del colegio cercano; si los vecinos se estacionan en cualquier parqueo o incluso si hay morosos en la Junta de Vecinos, aunque ese será otro tema.
Brenda aún no se decide, pero ya tiene claro que su compra será informada, estratégica y emocional. Que tiene que conseguir un buen asesor inmobiliario y un abogado experto, no solo por el dinero, sino por su tranquilidad.
Brenda entendió que volver a casa no es solo regresar: es elegir bien dónde volver a ser. Y como ella, miles de dominicanos sueñan con eso, pero hacerlo bien requiere más que nostalgia: se necesita información de calidad, estrategia y corazón.

