SANTO DOMINGO.- La “arquitectura de la verdad” es un concepto que propone transformar la forma en que se comunican y gestionan los proyectos inmobiliarios, con el propósito de recuperar la confianza del consumidor. Se trata de una propuesta para instaurar la transparencia como pilar fundamental del desarrollo inmobiliario en la República Dominicana.
El empresario Jordi Amargós, CEO y fundador de Veritat RD, expuso el tema durante el acto de clausura del primer diplomado para desarrolladores de Tur Formación Inmobiliaria, realizado esta semana semana, donde enfatizó la necesidad de desmontar prácticas que, según dijo, ya no resisten el escrutinio del mercado.
“Debemos reconocer la existencia de la arquitectura de la fachada, por decirlo así. Es un espejismo”, expresó al referirse a proyectos que se promocionan sin mostrar sus limitaciones. También señaló que “los cronogramas de entrega ignoran la dura realidad de los permisos” y que
muchos planes financieros “se basan en un acto de fe”.
Durante su exposición «la verdad vende», el profesional planteó que la industria enfrenta un reto central: la credibilidad. La relación entre compradores y desarrolladores se ha visto afectada por la falta de información clara
sobre riesgos, procesos y etapas reales de los proyectos, lo que ha generado una demanda creciente por mayor franqueza y precisión.
Amargós explicó que parte de la solución está en comunicar desde la vulnerabilidad técnica, mostrando lo que suele ocultarse. “Muchos desarrolladores optan por el silencio y la evasión… pero mostrar las debilidades crea una bola de nieve que genera confianza y empatía”,
afirmó. Añadió que el consumidor ya no tolera respuestas ambiguas: “El cliente dominicano está cansado de adivinar”.
Otro aspecto abordado por el empresario inmobiliario fue la importancia de comunicar con precisión el estado de los permisos. “La mayoría dice: ‘ya viene el D…’, pero ¿qué
tal si cambiamos ese discurso y le comunicamos al cliente en qué etapa están esos permisos?”, planteó. Según explicó, este cambio simple fortalece la relación comercial y disminuye la incertidumbre.
También advirtió que la falta de transparencia impacta directamente los resultados comerciales. “Un 70% de los proyectos del país no consiguen el ritmo de absorción que prometen”, citó, al explicar que esta situación obliga a replantear cómo se anuncian, venden y gestionan las
expectativas de los clientes.
Verdad para crear confianza
Uno de los elementos centrales del modelo es el ticket de compra transparente, una herramienta que, según expuso, ayuda a eliminar la especulación y permite que el comprador conozca dimensiones, precios, áreas reales y características específicas del inmueble. “Es parte de
esa arquitectura de la verdad”, indicó.
Amargós sostuvo que la transparencia debe ser parte del proceso desde el inicio. “Nosotros realmente no ocultamos, certificamos”, afirmó al describir la metodología que aplica en su empresa. Añadió que “el éxito de la comercialización es una consecuencia directa de construir con
transparencia total desde el punto cero”.
Recordó que en el país prevalece una percepción de duda hacia los agentes y desarrolladores. “La primera impresión que tiene la gente es que hablamos mentiras, y por eso nos cuesta mucho que nos crean la verdad”, señaló al insistir en la necesidad de adoptar prácticas más claras y consistentes.
Para cerrar, llamó a transformar la manera de presentar los proyectos inmobiliarios. “Dejemos de vender cemento y vendamos confianza; dejemos de vender fachadas y vendamos la arquitectura de la verdad”, expresó.
Concluyó con una referencia bíblica: “La gloria postrera será mayor que
la primera”. Recordó que la transparencia debe acompañar el dinamismo del mercado. “Tenemos un déficit habitacional mayor hoy en día y creciendo”, indicó, al resaltar que esta necesidad exige responsabilidad y claridad en cada etapa del desarrollo.
