El estilo con el que decoras tu hogar habla por sí mismo, pues refleja en toda su esencia tu personalidad, gustos y emociones. El diseño de interiores puede ayudarte a crear espacios que te hagan sentir bien, cómodo y satisfecho. Además, la decoración puede influir directamente en tu estado de ánimo, salud y bienestar.
Ahora que llega el verano, es un buen momento para ponerse a decorar tu hogar de forma asequible.
Existen muchos estilos diferentes de decoración, desde el minimalista, al étnico, pasando por el nórdico, el industrial o el vintage, para conseguir ambientes acogedores, relajados y alegres. Por ese motivo, te enumeramos las diferentes alternativas para conseguir un hogar luminoso, donde la armonía y el equilibrio serán los protagonistas:
Estilo Mediterráneo: estar en casa y sentirse de vacaciones
Es uno de los más populares y característicos actualmente. Se basa en el uso del blanco como color predominante, combinado con tonos azules, turquesas y verdes que transmiten calma o tranquilidad. Los materiales naturales como la madera, el mimbre, el algodón o el lino son imprescindibles, así como los motivos marineros, las rayas o las flores. Este estilo transmite luminosidad, frescura y armonía.
Estilo Tropical
Si te gustan los colores vivos y los estampados exóticos, esta debería ser tu elección. El verde, el amarillo, el rosa o el naranja son los protagonistas junto con las plantas, las frutas, los animales o las formas geométricas. Los textiles son fundamentales para darle ese toque divertido y original a tu casa, así como los complementos de cerámica, metal o cristal. Este estilo aporta energía, alegría y dinamismo.
Estilo Nórdico
Aunque pueda parecer una corriente propia de los meses de invierno, lo cierto es que este estilo es capaz de adaptarse a cualquier estación aplicando algunos cambios. Se trata de mantener la base de colores neutros y claros, añadiendo algunos toques de color pastel o coral que aporten calidez. Aunque los materiales predominantes deben ser naturales y sencillos, se pueden incorporar algunos detalles más sofisticados en tonos dorados o en mármol. Esta opción frece elegancia, confort y funcionalidad.
Rústico moderno
El ambiente campestre y natural es lo que prima en esta ocasión. Se caracteriza por el uso de materiales como la piedra, la madera, el hierro o el barro, que aportan calidez y textura. Los colores son neutros y terrosos, con algunos toques de verde o azul. En los muebles predominan las líneas sencillas y robustas, mientras que los complementos son de inspiración artesanal, como las cestas, los jarrones o las alfombras. Este estilo crea una atmósfera acogedora, tranquila y familiar.
¿Qué es el estilo boho chic en decoración?
Si te atreves con un estilo más original, este puede ser tu apuesta. Se trata de mezclar elementos de diferentes culturas y épocas, creando un ambiente lleno de personalidad y encanto. Los colores son vibrantes y variados, desde los tonos tierra, hasta los más llamativos como el fucsia o el turquesa. Los materiales son naturales y exóticos, como el bambú, el ratán o la seda. Los muebles optan por el estilo vintage o étnico, acompañados por complementos de lo más variados, como los cojines, las mantas, las lámparas o los espejos. Este estilo transmite alegría, creatividad y libertad.
