SANTO DOMINGO.- En República Dominicana el déficit habitacional asciende a 1.400.000, de acuerdo a los datos de Hábitat para la Humanidad que revelan que alrededor del 73% es de tipo cualitativo, lo que significa que el número de viviendas inadecuadas es mayor que la cantidad de familias sin vivienda.
Para Cesarina Fabián, directora nacional de Hábitat para la Humanidad República Dominicana, el déficit del país se mide desde dos escenarios: la dificultad que tienen las familias para adquirir una vivienda por estar fuera del sistema contributivo; y otro, la necesidad de dar una respuesta a la población, para que tengan acceso a viviendas resilientes y seguras.
Fabián explica para El Inmobiliario que, si bien es cierto, que el Gobierno tiene iniciativas que permiten a las familias de diferentes estratos socioeconómicos adquirir su primera vivienda, accediendo a proyectos habitacionales, mediante subsidios, aún queda mucho por hacer, porque todavía hay una gran cantidad de personas que ni siquiera tienen acceso a una de estas viviendas sociales.
Cesarina Fabián. (Fuente externa).
“Para cambiar esta situación, se puede complementar estas subvenciones del Estado con micro financiamientos. Es decir, créditos para vivienda que no son respaldados por hipotecas; sino que siguen los principios básicos de las microfinanzas con montos de préstamos pequeños, a plazos relativamente cortos y garantías alternativas”, sugiere la ejecutiva.
Añade que hay que trabajar en educación financiera con el objetivo de crear conciencia en la ciudadanía, y en particular, en los tomadores de decisiones para que las familias puedan organizar sus finanzas y realizar sus proyectos de vivienda progresivamente.
Fabián explicó que desde que Hábitat para la Humanidad llegó a República Dominicana en 1986, han impactado directamente en más de 17 provincias del país, en las que existen comunidades que comparten indicadores socioeconómicos bajos, y en donde la demanda de vivienda digna es una prioridad.
“Las necesidades fundamentales de estas comunidades están relacionadas con mejoras en los pisos, techos y acceso a servicios básicos como el agua; y, sobre todo, en el acceso a viviendas seguras y resilientes en un entorno impactado por fenómenos climáticos. Desde que Hábitat para la Humanidad llegó a República Dominicana, hemos trabajado precisamente en garantizar una vivienda digna para los dominicanos, a través del acceso a microcréditos y subsidios en la construcción y mejoras de las residencias”, expuso la representante.
Entre julio de 2023 y julio 2024, Hábitat para la Humanidad ha construido y mejorado las viviendas de más de 42 mil personas; lo que supone un total de 8,500 soluciones habitacionales.
Con estos recursos se ha impactado a más de 22 comunidades en 8 provincias del país: Santo Domingo Norte, Santo Domingo Este, Hato Mayor, El Seibo, Sabana de la Mar, Miches, San Cristóbal, Montecristi, San Juan, Azua, entre otras, explicó Fabián.
“Uno de los mayores retos que tenemos para continuar con esta labor, es seguir multiplicando alianzas público-privadas que contribuyan en la promoción de comunidades organizadas, comprometidas y empoderadas. Nuestra responsabilidad como organización es servir de ayuda y colaboración para atender el déficit cualitativo de vivienda en el país. Esto supone un gran compromiso y, sobre todo, responsabilidad, porque implica la participación y consenso de todos los actores que intervienen”.
