La arquitecta paisajista Massiel Mejía explica que el diseño regenerativo y el uso de vegetación autóctona definen los criterios aplicados en proyectos urbanos y residenciales.
SANTO DOMINGO.-El uso de especies nativas, la resiliencia climática y el diseño de espacios verdes orientados al bienestar humano figuran entre las principales prácticas que definen el paisajismo sostenible en 2026, de acuerdo con la arquitecta paisajista Massiel Mejía.
De acuerdo a la especialista el paisajismo tiene un impacto directo en la calidad de vida y en la respuesta ambiental de las ciudades, al integrarse como parte funcional de los proyectos. “La naturaleza ya no se integra como un elemento decorativo, sino como parte esencial del proyecto”, afirmó
Enfoque regenerativo en el paisajismo
Entre los criterios que se aplican en el diseño paisajístico se encuentra el enfoque regenerativo, orientado a la restauración del entorno y a la recuperación de ecosistemas.
En una entrevista para El Inmobiliario, Mejía explicó que “nos enfocamos en crear paisajes auténticos, regenerativos y resilientes, analizando de manera exhaustiva los contextos y las zonas de vida donde se desarrollan los proyectos”.
Uso de especies nativas y endémicas
El uso de especies autóctonas, nativas y endémicas se mantiene como uno de los principales criterios para reducir el consumo de agua y garantizar la adaptación al clima local.
Según explicó la arquitecta, esta selección permite un menor requerimiento de mantenimiento. “Las utilizamos de forma inteligente y estratégica según el contexto de cada proyecto”, señaló.
Espacios urbanos y bienestar
En los proyectos urbanos, el paisajismo sostenible prioriza la creación de espacios que aporten beneficios directos a la salud y al bienestar de las personas.
“Los parques y áreas públicas bien diseñadas aportan sombra, reducen las temperaturas y mejoran el bienestar en la vida cotidiana”, indicó Mejía.
Superficies permeables y gestión del agua
Entre las prácticas que se aplican también figura el aumento de superficies blandas y permeables, con el objetivo de favorecer la infiltración del agua.
“Buscamos que las superficies duras no interrumpan los procesos naturales del suelo”, explicó, al referirse al uso de materiales que promueven la permeabilidad.
Criterios estéticos en el diseño
En cuanto al diseño visual, el paisajismo contemporáneo se orienta hacia un estilo naturalista y espontáneo, que prioriza composiciones más orgánicas.
“Este enfoque permite generar espacios que respetan la flora y la fauna y que, al mismo tiempo, resultan funcionales”, señaló.
Mejía indicó que la funcionalidad, la estética y el compromiso ambiental son criterios que se evalúan de manera conjunta en los proyectos de paisaje.
“Cada uno de estos aspectos es importante para lograr un equilibrio real entre el ser humano y la naturaleza”, afirmó.
La arquitecta destacó que los proyectos de espacio público tienen un impacto urbano, social y ambiental significativo.
En ese sentido, señaló que “los parques urbanos permanecen en la memoria colectiva y evidencian los beneficios del paisaje bien planificado”.
Para 2026, estas prácticas continúan consolidándose como parte de los criterios aplicados en proyectos urbanos y residenciales. .



