Por Escalin Pozo
El Inmobiliario
Todos los caminos de la agente inmobiliaria Kreisky Pedroza conducen a un mismo lugar: el mundo de bienes raíces. Tanto así que su “plan B” tiene como único objetivo mejorar su “plan A”, el cual se enfoca en siempre permanecer dentro de este sector.
Así de segura lo plantea, sin ningún titubeo. Ella no se figura fuera de esta profesión, pues brindar servicios dentro de este terreno es algo que la llena de satisfacción.
Su amor por esta carrera viene con su propia esencia. Desde su ocupación base, que es la Economía, siempre se inclinó por los procesos que demandaban brindar algún tipo de atención a terceros.
De hecho, dentro del sector financiero su experiencia apuntaba al servicio y a la resolución de problemas. Pero antes de continuar navegando por este viaje de su profesión, realicemos una parada en su historia personal, en cómo inició todo.
Desde el oriente de Venezuela, vino Pedroza a República Dominicana, donde se sintió prácticamente como en casa por la similitud de ambos países desde su percepción. Siendo para ella una gran bendición.
Ejerciendo como agente ya son cinco años los que lleva. En el trayecto de este sendero, su esposo Elpidio Baute ha sido su compañero y Moisés, su hijo, su socio desde el principio.
Desde que comenzó esta profesión en 2019, la abrazó y ha disfrutado cada fase de su desarrollo como agente, viviendo cada etapa de su evolución.
“Desde ser principiante y ser esponja, hasta ser líder y compartir mis conocimientos del sector”, así exteriorizó al ser entrevistada por El Inmobiliario.
Pero ¿cómo realmente inició en este mundo? Cuenta que luego de entender la economía de República Dominicana, decidió comenzar su carrera en el sector inmobiliario para así “ofrecer asesorías adecuadas”.
Antes, trabajó por más de 10 años en el sector financiero como analista de crédito; también fue gerente de oficina y de banca corporativa en el estado Carabobo, considerado en aquel momento como una zona industrial de gran importancia para su país natal.
Al trabajar como agente inmobiliaria, hay una parte humana que la atrapa y mantiene apegada. Y es la satisfacción que siente cada vez que ve a una persona adquirir la propiedad que les conviene, sea como inversión, vivienda o para un negocio.
“La mayor satisfacción es generar una relación de beneficio mutuo que permanezca en el tiempo con ese cliente”, precisó Kreisky.

Kreisky Pedroza. (Fuente externa).
Por otra parte, señaló que esto le ha permitido recibir una “recompensa invaluable” por medio de los lazos de amistad y la familiaridad que se construye con cada cliente.
Al hablar sobre su trabajo en la agencia Elite House, Pedroza asegura que se encuentra dentro de los primeros lugares de productividad.
“Estoy agradecida con Dios por las bendiciones que esta actividad me ha dado, y las que están por llegar. Mi foco es 100 % la actividad inmobiliaria y las recompensas han sido maravillosas”, dijo.
En esta inmobiliaria hay aproximadamente 200 agentes, precisó. En su equipo, coordina un total de 35 personas, las cuales dividide en cinco subgrupos con el objetivo de convertirlos en top producers y, al mismo tiempo, en mejores personas.
Su trabajo, un estilo de vida
A las 5:30 de la mañana ya está iniciando su jornada. Sin embargo, todo lo que le sigue durante el día, sea en el plano laboral o personal, no está sujeto a un horario.
“Puedo estar en una celebración y trabajo, o estar trabajando y celebro. Ya no diferencio ni separo mi actividad. Mi familia lo sabe, mis clientes lo saben. Mi mente está siempre en modo crecimiento”, afirmó.
Kreisky tiene claro que su labor como agente inmobiliario va más allá de simples transacciones. Al preguntarle si un agente inmobiliario contribuye al bienestar social, su respuesta fue categórica: “Todas las actividades lícitas, reguladas y realizadas con cariño contribuyen al bienestar de la sociedad. Hay que esforzarnos por hacerlo de la mejor manera, hagas lo que hagas, en el país que sea”.
Sobre los retos del sector, prefirió aferrarse a una frase que leyó hace poco en un letrero: «‘Siempre habrá problemas y siempre soluciones’. Me concentro en orar y actuar, y funciona», comentó.
Finalmente, señala que el agente inmobiliario que busca ser productivo debe estar en constante aprendizaje, amar lo que hace, tener una mentalidad positiva y mantener el equilibrio emocional.