Afirma que persiste un “sentimiento de guacanagarix” que afecta a los profesionales dominicanos.
SANTO DOMINGO.– El arquitecto Roberto Rijo expresó su preocupación por la tendencia de diversas instituciones, especialmente en el ámbito gubernamental, de contratar empresas extranjeras para diseñar y ejecutar proyectos en República Dominicana.
Rijo describió esta costumbre como parte de un antiguo “sentimiento de guacanagarix” que, según afirmó, sigue manifestándose en decisiones que favorecen lo extranjero por encima del talento nacional.
Explicó que esta práctica se observa tanto en entidades públicas como en algunas instancias institucionales privadas, donde se opta por buscar firmas de diseño extranjeras aun cuando en el país existen profesionales capacitados para asumir esos encargos.
El arquitecto calificó esta preferencia como “una aberración”, debido a que República Dominicana cuenta con el capital creativo necesario para desarrollar proyectos de calidad.
Afirmó que el país posee el conocimiento y la preparación profesional suficientes, y que lo que falta es que las instituciones involucradas dediquen tiempo a investigar y reconocer quiénes pueden realizar el trabajo localmente.
“Es cuestión de que esas empresas y esas organizaciones, con un poquito de inteligencia, averigüen quién puede hacer las cosas”, expresó.
Rijo señaló que, en efecto, pueden existir casos específicos donde un proyecto requiera la asistencia de una oficina internacional con experiencia muy especializada en un área determinada.
Sin embargo, aclaró que esa participación puntual no debe confundirse con permitir que esas firmas extranjeras sean las responsables de ejecutar completamente los proyectos dentro del territorio dominicano.
Indicó que permitirlo representa un acto de ignorancia institucional, ya que desplaza injustamente a los profesionales dominicanos que cuentan con la capacidad para realizar esas tareas.
Rijo advirtió que esta práctica no solo afecta la participación del talento local, sino que también implica un uso inadecuado de recursos que podrían invertirse en fortalecer el desarrollo creativo interno.
Expresó que cuando se privilegia a compañías foráneas para ejecutar los proyectos, se desaprovecha la oportunidad de generar crecimiento profesional y económico para el sector nacional.
El arquitecto insistió en que los recursos destinados a estas firmas debieran invertirse en la creación de valor dentro del país, apoyando a los arquitectos, diseñadores y profesionales dominicanos.
Subrayó que mantener esta tendencia solo profundiza la desventaja frente al talento local, que muchas veces no recibe las oportunidades que merece.
Rijo concluyó señalando que es necesario revisar estas prácticas y reconocer que en República Dominicana existe la capacidad profesional para asumir los proyectos que se diseñan para el país.

