SANTO DOMINGO.-El empresario Antonio Espaillat, propietario de la discoteca Jet Set, donde el 8 de abril del presente año ocurrió una de las más lamentables tragedias del país, con un saldo de 236 fallecidos, se presentó este jueves a la Dirección de Persecución del Ministerio Público y ante su titular Wilson Camacho, quien encabeza la investigación del caso.
El empresario llegó a las instalaciones de la Procuraduría acompañado de su hermana, Maribel Espaillat, y su abogado, Miguel Valerio, para asistir al interrogatorio que será conducido por Camacho, en coordinación con la fiscal del Distrito Nacional, Rosalba Ramos, ambos a cargo de las pesquisas del caso.
En el colapso del emblemático club nocturno resultaron además más de 180 personas heridas.
El 7 de marzo, un día antes de cumplirse el primer mes del derrumbe del techo, la Procuraduría General de la República incautó el terreno, donde quedan las ruinas de lo que fuera por más de 30 años un símbolo de alegría y entretenimiento en el Distrito Nacional.
Hasta el momento, se han interpuesto 66 acciones legales, entre ellas 43 denuncias y 23 querellas dirigidas contra el empresario Antonio Espaillat y otros accionistas del establecimiento.
Ayer 11 de junio, la comisión especial que investiga las causas del derrumbe del Jet Set entregó al Ministerio Público, el informe preliminar sobre las causas que generaron la desgracia.
La comisión a cargo del peritaje está conformada, además del ingeniero Madera, por el profesor Eduardo Fierro, ingeniero forense de la Universidad de California en Berkeley, Estados Unidos; el ingeniero Máximo Corominas, patólogo estructural del Instituto de Ciencias de la Construcción Eduardo Torroja de España; ingeniero Marcos Paniagua Yost, con maestría en la Universidad Católica de Chile y el ingeniero Remy Luciano, con maestría en ingeniería sismo resistente en la Pontificia Universidad Católica Madre y Maestra (PUCMM).

